Sobre la colina vimos el silencio del valle,
fuimos llamados a atestiguar ciclos sólo del pasado,
y obtenemos todo esto con el movimiento
en medio de la advertencia formulada.
Aprender a reirse de uno mismo y no tanto de los otros; primer paso para conocer nuestras virtudes y defectos, poder mejorar o simplemente aceptarse como uno es.